Conocer mas sobre el carboncillo que usamos en los bocetos

Cuando decidimos comenzar nuestra obra haciendo un boceto previo, la mayoría de nosotros optamos por hacerlo con carboncillo.

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Esto se debe a que es un material muy útil y de fácil manejo, ya que una vez que aprendemos a usarlo correctamente, nos permite realizar trazos y difuminados en el soporte con muy poco esfuerzo.

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Y aunque nosotros lo usamos para bocetar, hay muchos artistas que lo usan directamente para terminar sus obras, (que por cierto quedan muy bellas) y las hacen sobre papel, lienzos y otra gran variedad de soportes.

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La presión que se la dá al trazo y la textura del soporte, son condicionantes para el resultado. Los brillos o luces se pueden sacar con goma o miga de pan, y otros tonos se pueden obtener con un pincel humedecido simplemente con agua.

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El carboncillo, un poco de historia y técnica.

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Es un material que se usa para dibujar desde hace muchos años. Ya desde épocas prehistóricas, lo usaban para decorar cuevas al aprovechar palos quemados que se carbonizaban en fuegos provocados por el hombre o por la naturaleza. Era usado por dibujantes y pintores, ya que esta técnica se describe en manuales de dibujo de hace varios siglos.

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Hoy en día, su proceso de fabricación y comercialización ha cambiado. El carboncillo se obtiene carbonizando madera principalmente de sauce, en cámaras a prueba de aire. Se venden según el fabricante, en bastones de 75 y 150 mm. El grosor varía de entre 5 y 15 mm, y su dureza va desde uno blando a los mas duros.

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Si te acercas a la tienda de arte mas cercana a tu casa, sin duda te ofrecerán algún tipo de carboncillo dentro de las características nombradas. Elige el que mas se adecue a tus necesidades y te resulte de mas fácil manejo.

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La técnica para usar este material permite, tanto en bocetos como en dibujos al claroscuro, realizar unos trazos muy ágiles. Se pueden generar muy lindos tonos de grises al difuminarlo, y se le suma el beneficio de un muy fácil borrado.

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Beneficio de corrección por un lado, pero que trae aparejado el inconveniente de la suciedad que se produce al manipularlo. A su vez, debemos trabajarlo con precaución para no borrarlo accidentalmente.

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Lo podemos usar entonces como ya dijimos, para bocetos o una obra totalmente realizada con este material. En cualquiera de los casos, siempre se debe usar como terminación un fijador para evitar un dibujo borroneado.

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